Si ha estado en el REPECO ahora estará en el Régimen de Incorporación Fiscal, que te permitirá emitir facturas, cobrar en terminales, bancarias, acceder a créditos, no pagarás impuesto el primer año, etc.
Trámites previos
Para integrarte a este sistema se requiere en primer lugar de darte alta ante el Sistema de Administración Tributaria (SAT) y tramitar ti firma FIEL, para esto se necesita iniciar el procedimiento en la pagina de Internet para obtener una serie de archivos que tendrás que llevar al módulo u oficina mas cercana donde se te tomaran huellas digitales y fotografías del iris de tus ojos. Posteriormente te darán tu certificado, por lo que tendrás que llevar un dispositivo de almacenamiento de datos. Se recomienda de preferencia pedir cita para una mejor atención.
El siguiente paso es obtener el certificado de sello digital, que se tramita en la página del SAT en donde se puede descargar el programa Solcedi. Te solicitara tu firma FIEL, CURP, RFC, llenar los formularios, crear una contarseña y al final se generará el certificado. En Certisat podrás verificar la vigencia de tu certificado.
Procedimiento para facturar
Para poder facturar tendrás dos opciones, una es contratar el servicio ante una empresa autorizada o bien aprovechar la herramienta gratuita que brinda el SAT. Para esta opción tendrás que ingresar los datos que te solicite el sistema, para que tenga validez se tendrá que timbrar y entonces se podrá enviar al correo electrónico del cliente.
Las facturas se guardarán en archivos en formato pdf y xml para llevar la contabilidad. Con proveedores comerciales tendrás que analizar las ventajas que te ofrecen, en especial si facturas con mucha intensidad.
Ventajas de los comprobantes fiscales
Las ventajas que ofrece este sistema es el ahorro de papel, tinta, espacio, dinero, etc. Ya no se tendrá que ir con un impresor, ni se tendrán que cancelar folios anteriores. Lo mas importante es que ya no se podrán falsificar, por sus características de inviolabilidad y puedes verificar los folios.
Facilitarán llevar la contabilidad, para lo cual se recomienda que los empresarios conozcan más sobre sus obligaciones fiscales, que se mantengan actualizados, que se involucren más con sus contadores y que resguarden mejor sus comprobantes.
